Falleció Zulma Sáenz
5to. A – Promoción 1960
Nota publicada en Cambio Online 2000
http://www.cambio2000.com.ar/2009/29-09-10/pagina.php?id=3250
“Nos dejó una defensora de los derechos del animal”. La vecina recientemente desaparecida fue la gestora del Alberto Catón. Por tal motivo, sus compañeras de lucha le rinden un homenaje.
Zulma Sáenz falleció a los 72 años en Carhué, donde se la recuerda y reconoce principalmente en tres ámbitos en los que se movió: la docencia, el teatro y su mundo junto a los animales.
Precisamente sobre su trabajo en la defensa de los derechos del animal la recuerdan sus compañeras de lucha.
“Hace una veintena de años, Zulma Sáenz comenzó a gestar la idea de conformar un albergue para perros de la calle”, recordaron las integrantes de la comisión del Albergue Catón.
“Por aquellos tiempos, quien era intendente, el señor Guillermo Narbaitz le cedió un terreno en proximidades del corralón municipal, donde comenzar a cristalizar la idea; y según nos han contado, la denominación del albergue responde al nombre del perro de este jefe comunal que atendió la necesidad: Catón”, precisaron.Por su parte, la médico veterinario Belén Montenegro destacó que “con esa idea, lo que Zulma pretendía e hizo siempre, fue proteger los animales. A ella no le interesaba si el que estaba en condición de vulnerabilidad era un perro, un gato o una hormiga; quería defender los derechos de los animales, y veía que poca gente entendía esto, mientras que para ella, eran como su familia”.“Zulma logró conformar el albergue en ese sitio, pero más tarde, por cuestiones que no tenemos claro, fue trasladado a las actuales instalaciones. En ese tiempo, ese lugar tan alejado sufría inundaciones, había que entrar con botas, y hacer un real sacrificio por atender a los animales; con lo cual podemos decir que ella ha dejado parte de su salud en esta misión”, añadió Montenegro. Andrea Reising, en tanto, apuntó que “por lo que nos decía, se daban cuestiones que provocaban que el placer de atender a los animales, distara mucho de ello, porque Zulma se sentía sobrepasada, se hacía muchos problemas, aunque nunca bajó los brazos, la tuvimos entre nosotros, trabajando por el Catón hasta estos días, ya que participó de la última reunión, y aunque ya su salud estaba algo deteriorada, seguía para adelante”.
“Zulma tenía varios stents, una trombosis en una pierna, fumaba muchísimo, y esas eran cosas que le impedían movilizarse demasiado, por eso ya no hacía determinadas tareas, y más aún cuando en su propia casa tenía una mini residencia de animales para atender, lo que no le dejaba tiempo para dispensar atenciones a los del albergue”, apuntó Belén Montenegro.
Las integrantes del Albergue Catón subrayaron que “con 72 años, Zulma no quería jubilarse; tenía miedo que el dinero no le alcanzara para alimentar a sus animales; por tal motivo seguía trabajando”.
Zulma Sáenz, nació, vivió, creció, hizo grandes aportes cívicos y murió en su Caruhe querido, siempre evocó su paso por la Escuela Normal de Bahía Blanca.
Enviado por Dimas Pettineroli
5to. A – Promoción 1960
Nota publicada en Cambio Online 2000
http://www.cambio2000.com.ar/2009/29-09-10/pagina.php?id=3250
“Nos dejó una defensora de los derechos del animal”. La vecina recientemente desaparecida fue la gestora del Alberto Catón. Por tal motivo, sus compañeras de lucha le rinden un homenaje.
Zulma Sáenz falleció a los 72 años en Carhué, donde se la recuerda y reconoce principalmente en tres ámbitos en los que se movió: la docencia, el teatro y su mundo junto a los animales.
Precisamente sobre su trabajo en la defensa de los derechos del animal la recuerdan sus compañeras de lucha.
“Hace una veintena de años, Zulma Sáenz comenzó a gestar la idea de conformar un albergue para perros de la calle”, recordaron las integrantes de la comisión del Albergue Catón.
“Por aquellos tiempos, quien era intendente, el señor Guillermo Narbaitz le cedió un terreno en proximidades del corralón municipal, donde comenzar a cristalizar la idea; y según nos han contado, la denominación del albergue responde al nombre del perro de este jefe comunal que atendió la necesidad: Catón”, precisaron.Por su parte, la médico veterinario Belén Montenegro destacó que “con esa idea, lo que Zulma pretendía e hizo siempre, fue proteger los animales. A ella no le interesaba si el que estaba en condición de vulnerabilidad era un perro, un gato o una hormiga; quería defender los derechos de los animales, y veía que poca gente entendía esto, mientras que para ella, eran como su familia”.“Zulma logró conformar el albergue en ese sitio, pero más tarde, por cuestiones que no tenemos claro, fue trasladado a las actuales instalaciones. En ese tiempo, ese lugar tan alejado sufría inundaciones, había que entrar con botas, y hacer un real sacrificio por atender a los animales; con lo cual podemos decir que ella ha dejado parte de su salud en esta misión”, añadió Montenegro. Andrea Reising, en tanto, apuntó que “por lo que nos decía, se daban cuestiones que provocaban que el placer de atender a los animales, distara mucho de ello, porque Zulma se sentía sobrepasada, se hacía muchos problemas, aunque nunca bajó los brazos, la tuvimos entre nosotros, trabajando por el Catón hasta estos días, ya que participó de la última reunión, y aunque ya su salud estaba algo deteriorada, seguía para adelante”.
“Zulma tenía varios stents, una trombosis en una pierna, fumaba muchísimo, y esas eran cosas que le impedían movilizarse demasiado, por eso ya no hacía determinadas tareas, y más aún cuando en su propia casa tenía una mini residencia de animales para atender, lo que no le dejaba tiempo para dispensar atenciones a los del albergue”, apuntó Belén Montenegro.
Las integrantes del Albergue Catón subrayaron que “con 72 años, Zulma no quería jubilarse; tenía miedo que el dinero no le alcanzara para alimentar a sus animales; por tal motivo seguía trabajando”.
Zulma Sáenz, nació, vivió, creció, hizo grandes aportes cívicos y murió en su Caruhe querido, siempre evocó su paso por la Escuela Normal de Bahía Blanca.
Enviado por Dimas Pettineroli
Aclaración: Zulma era prima de Bocha.
Las Chicas
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